La l acusados de presunta complicidad en delitos de lesa humanidad cometidos durante la última dictadura cívico militar.
Fuentes judiciales indicaron esta mañana que la máxima instancia en materia penal del país rechazó un recurso presentado por la fiscalía contra la decisión del Tribunal Oral en Federal Uno (FOT1), que admitió la libertad de los imputados durante el proceso.
La medida benefició a los ex jueces federales Elst, Miret y Petra Recabarren respecto de quienes la Cámara afirmó que "no se argumentó la existencia de riesgo de fuga o entorpecimiento de las investigaciones".
En la causa también está siendo juzgado el ex juez federal Otilio Roque Romano, quien sí está preso porque poco antes de ser destituido del cargo -mientras se tramitaba su jury de enjuiciamiento- se fugó a Chile, desde donde debió ser extraditado y puesto a disposición de la justicia.
Los ex magistrados acusados de colaborar con quienes usurparon el poder el 24 de marzo de 1976 afrontan el cargo de "denegación y retardo de justicia", que establece que quien "faltando a la obligación de su cargo, dejare de promover la persecución y represión de los delincuentes", será reprimido con inhabilitación absoluta de seis meses a dos años.