Los caminos del General

Recorridos culturales en diversos escenarios que recuerdan el paso de Don José de San Martín y a la gesta libertadora, por la provincia .

Los caminos del General
Los caminos del General

El General Don José de San Martín nació en Yapeyú en 1778 y murió en París en 1850 pero eligió Mendoza para vivir y diseñar la hazaña libertaria que lo puso en la gloria.

Nuestra provincia tiene varios hitos culturales y turísticos que lo recuerdan. Los circuitos sanmartinianos ponen en valor los pasos del General tanto con su investidura militar y patriota como con la simpleza de un padre cuyano.

Hoy es el aniversario de su fallecimiento y este mes se cumplen  doscientos años desde que San Martín fuera gobernador intendente de Cuyo, buen momento para embarcarse en un paseo por la historia.

La Bandera del Ejército de los Andes

Ubicado frente a la Casa de Gobierno dentro del Parque Cívico se erige el Memorial de la Bandera, un original edificio de carácter evocativo que alberga el pabellón del Ejército de los Andes y de la campaña libertadora de Argentina, Chile y Perú.

Se suma además, la exhibición de dos trofeos de guerra correspondientes a la época de la emancipación nacional entregadas por el Museo Histórico Nacional.

Son banderas españolas capturadas en la campaña, que en su tiempo habían sido donadas por el General San Martín a Mendoza y que actualmente han sido restituidas a la provincia.

Antes de que la bandera tuviese su memorial (y por muchos años), permaneció en el cuarto piso de la Casa de Gobierno, próxima al despacho de los gobernadores, en clara alusión a la representatividad e investidura de San Martín como primer Gobernador Intendente de Cuyo.

Agosto es recomendable para visitar este predio con los más pequeños que honran al prócer en los actos escolares, y presenciar el cambio de guardia con la actuación de la banda Talcahuano, que recrea el acto con uniformes históricos, movimientos de fusilería y tambores.

El paseo cultural por el interior del Memorial es guiado por un soldado de custodia, quien pertenece al Regimiento de Infantería de Montaña 11 General Las Heras, que desde 1992 realiza la guardia de honor al símbolo patrio.

El espacio puede visitarse de martes a viernes de 10 a 18 y sábados y domingos de 11 a 17. Los lunes permanece cerrado. La entrada es libre y gratuita y se brindan charlas en el auditorio con el apoyo de documentales y películas referidos a la Gesta Sanmartiniana.

Por la ciudad

El Memorial se convierte entonces en el puntapié inicial para que mendocinos y visitantes retomen los circuitos del prócer conformados por monumentos históricos nacionales, sitios históricos y lugares de conmemoración de la Gesta Libertadora. Incluye además de los hitos, bellas plazas, oasis rurales, valles y montañas.

La ruta de la Ciudad Vieja en Capital arranca en el Área Fundacional y su museo situado donde estuviera el Cabildo (abierto de martes a sábados de 8 a 20; domingos de 12 a 18,30. Entrada $ 18).

Puede continuar por la Alameda, ampliada por el General, siendo unos de los sitios más evocados en sus relatos de sosiego durante su estadía en Mendoza.

El Conjunto Solar Histórico incluye la Biblioteca San Martín, el Museo Sanmartiniano: Le sigue la casa natal de Merceditas.

Puede ampliarse con el Circuito Centro Cívico y Parque General San Martín que señala sitios de homenaje y conmemoración como la Pinacoteca Sanmartiniana “Fidel Roig Matons” donde se exhibe el lienzo a la Gran Gesta, el Archivo General de la Provincia, y el Monumento al Ejército de los Andes en el Cerro de la Gloria, espectacular escultura de relieve donde el relato de la hazaña permite visualizar además toda la ciudad en un mirador tan famoso que se encuentra en los billetes de cinco pesos y, finalmente el sepulcro del General Gerónimo Espejo en el Liceo Militar.

El visionario

El Este mendocino revaloriza al hombre más que al militar. El departamento de San Martín evoca a un Don José que promovió el progreso y proyectó una provincia pujante.

La importancia de los canales de riego construidos con el apoyo de los prisioneros realistas de Chacabuco y Maipú, el molino harinero -el primero de la zona-  y la histórica casona, réplica de la emplazada en su chacra, donde decidiera establecerse y que hoy es el museo "Las Bóvedas".

Ésta es una visita reveladora y realmente uno de los imperdibles si de paseos hacia el ayer se trata. Hay que aclarar que el museo permanecerá cerrado hasta octubre por remodelaciones, pero agende la visita porque no se arrepentirá.

La Gesta

El Cruce de los Andes del Ejército Libertador llamó la atención de los historiadores de todas partes del mundo, pues fue el disparador de tantas independencias continentales.

En la actualidad existen propuestas turísticas que permiten recorrer esos mismos caminos transitados por aquellos patriotas.

Partiendo desde el Campo Histórico El Plumerillo (Lisandro Moyano e Independencia, Las Heras), donde se formó el Ejército Libertador y desde donde partió al cruce, pasando por el Monumento de Canota, representado por dos murallones realizados en piedra que marcan el lugar donde se dividió la Campaña en dos columnas hacia 1817.

Luego se puede pasar por Villavicencio- para conocer la Reserva Natural, el hotel y las termas- ascendiendo por la vieja ruta de montaña a los Paramillos, enclave minero jesuita, hasta llegar a Uspallata, el paso que tomó una de las columnas libertarias.

También se puede abordar la cordillera con una visión histórica y descubrir Picheuta y Potrerillos, como lugares de los primeros combates de la campaña de los Andes.

Por otro lado, el Valle de Uco resguarda el regreso del prócer con el monumento al Manzano Histórico y el Retorno a la Patria, lugar donde se considera que San Martín decide afincarse en tierras mendocinas.

Otro de los imperdibles de Mendoza para seguir los pasos del prócer, es indispensable conocer el museo que se emplaza en el sitio.

Los chicos se divierten cuando se les cuentan algunos datos como que algunos pueblos del Valle fueron nombrados por acciones del General como La Consulta, en San Carlos, que era el sitio en el que se preguntaba a los aborígenes conocedores de la zona para diseñar la estrategia que lo llevaría a cruzar la cordillera y desorientar a la tropa realista.

En este departamento también se puede  visitar los restos del Fuerte y el Museo del Regimiento de Infantería 11.

El cruce ayer y hoy

En enero de 1817, José de San Martín pone en marcha su plan y  emprende la campaña militar más osada de nuestra historia, lo que implica el cruce de los Andes.

Muchos aventureros concretan el afán de vivir la experiencia en expediciones que atraviesan la cordillera a caballo rememorando los pasos de las tropas sobre los mismos escenarios.

Baqueanos conocedores de la montaña ofrecen su experiencia para emular a alguna de las columnas. El más audaz es el Paso del Libertador por el Valle de Los Patos, una vivencia que puede durar hasta 10 días, llegando a una altura de 4.000 m.s.n.m. con bellísimas postales constantes.

Incluso se puede divisar hasta el Cerro Aconcagua. Otra opción es el paso del Planchón en Malargüe, menos peligroso por la altura y con paisajes totalmente cambiantes.

Entre los más conocidos es el Cruce por el Portillo situado a poco del Manzano Histórico, que tras cruzar la frontera arriban a las termas de El Caletón en Chile. Hay muchas empresas que ofrecen estos tours en verano.

Es importante que cuenten con habilitación y estén inscriptos en Turismo. Entre los valores relevados la expedición cruce de los Andes a caballo tiene un valor de entre $ 8.000 y $ 10.000. Por 7 días cuesta U$S 1.300.

La fiesta despedida

Maipú alberga uno de los sitios más glamorosos de la historia sanmartiniana. La casa de las Bóvedas de Rodeo del Medio fue el lugar elegido por el general para dar su fiesta de despedida antes de partir a Chile.

También fue sitio de visitas de presidentes argentinos del siglo XIX. La casona conocida como la estancia de los Molina fue declarada Monumento Histórico Nacional.

Documentos de la época registran su construcción en 1750 por la aristocrática familia Molina que contó con dos gobernantes de la provincia Pedro Molina y Luis Molina (ambos la habitaron).

Además fue el escenario de reuniones políticas y estrategias de guerra. Pese a sufrir varios deterioros y pasar varios años en el olvido, la dependencia de Patrimonio Cultural de Maipú encaró su restauración y la vistió con muebles de la época siendo una de las visitas obligadas en el recorrido turístico  a partir de setiembre.

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