Leandro Acosta: “Se frenó un poco el crecimiento que traía el consumo de carne de cerdo”

El productor porcino asegura que el aumento del valor del producto en el corto plazo ha generado una meseta en las ventas. Admite que el precio del ganado en pie todavía está alto.

Ha focalizado su negocio en la carne porcina. Su emprendimiento es de escala relativamente menor, pero tiene un par de fortalezas que le han permitido sobreponerse a los fuertes altibajos que viene sufriendo el sector. Una, que su estructura de producción primaria tiene un fuerte soporte tecnológico. La otra, que al eslabón de la cría y el engorde le sumó, hace unos años, la faena y comercialización.

En diálogo con Los Andes, el empresario de San Rafael, Leandro Acosta, aborda temas de coyuntura y no esquiva opinar sobre cuestiones estructurales que hacen a la competitividad no sólo de las empresas del sector sino a las pymes en general.

-¿Cómo está el panorama de la producción porcina?

-Como ocurre todos los años, desde hace un mes aproximadamente subió mucho el precio del cerdo en pie. Estaba en 20 pesos el kilo y se fue a 23. La verdad es que esto no nos favorece porque, si a eso le sumamos que el precio de carne vacuna se ha mantenido y, en algunos casos, ha bajado, la consecuencia es que se frenó un poco el crecimiento que traía el consumo de carne de cerdo.

-Pero hace unos meses el temor era que, si no se recuperaba el precio, los criadores podían tener problemas serios…

-Es que son negocios distintos. La situación del productor primario se acomodó un poco con estos precios. Enhorabuena. De hecho, yo también soy productor. Pero lo que ocurre es que al frigorífico (nosotros somos un frigorífico chico) nos complica un poco porque el precio de la carne en fresco se ha ido muy arriba y quedamos demasiado cerca de la carne de vaca, que es lo que más consume la gente.

-La res porcina, en gancho, rinde más que la bovina. ¿Por qué la diferencia de precio en el mostrador no es mayor?

-Es que el precio del cerdo está a un nivel más o menos lógico. Lo que no está a un nivel lógico es el precio de la carne vacuna. Basta comparar con los precios que tiene en cualquier otro lugar del mundo. Es muy cara en otros países.

-¿Qué señales le llegan desde frigoríficos, pequeñas carnicerías y restaurantes de la zona a quienes les provee?

-Han tenido un mal año. De todos modos, hay clientes que son bastante precavidos y ya hicieron sus pedidos. Ha bajado el nivel de demanda, como ha ocurrido con todo. Pero todavía no tenemos claro cuánto menos se terminará vendiendo.

-¿Qué pasó con las importaciones de carne porcina de Brasil y Dinamarca?

-Parece que se frenaron. En realidad, nos encontramos con los grandes frigoríficos que hacen maniobras que no entiendo. Porque primero se stockearon para inducir una baja del precio del cerdo en pie. Después volvió a subir el precio en pie (aunque es posible que ahora empiece a bajar un poco). Es raro lo que han estado haciendo y no sé por qué lo hacen.

-¿Cómo repercuten estos vaivenes de mercado en la estructura productiva, sobre todo de los establecimientos de menor escala?

-Tiene su impacto. El nuestro es un establecimiento chico (tenemos 120 madres), y si no hemos sufrido tanto esos vaivenes es porque hacemos el ciclo completo. Pero hace 6 ó 7 meses, cuando el maíz llegó a estar a 3 pesos el kilo y la soja a 5, con un cerdo de 16 ó 17 pesos el kilo en pie, muchos criaderos, en todo el país, tuvieron que cerrar sus puertas. El productor que no era muy eficiente, no pudo aguantar.

-¿Qué precio tiene el maíz hoy, y cuál es la tendencia del precio del capón en pie?

-El maíz, puesto en Mendoza, anda alrededor de 2.200 pesos la tonelada. En cuanto al precio del capón en pie, parece que va a empezar a aflojar un poco, porque en estas últimas dos semanas viene con tendencia a la baja. Puede llegar a estacionarse en $ 21 o $ 22 el kilo vivo. El maíz va a seguir estando a $ 2 o $ 2,20, y el expeller de soja lo estamos pagando $ 4. A todos estos precios hay que sumarle el IVA.

-¿Cómo se ve, hacia adelante, el panorama de la actividad?

-No sabría qué decirle. Es cierto que ahora podemos llegar a tener un leve repunte en el verano, porque los días están más agradables, la gente se junta y se come un asado, o va a un restaurante.

Además, habrá que ver si se recupera el poder adquisitivo de los ingresos que tiene la gente. Pero el problema es que, tanto con el anterior gobierno como con éste, la carga tributaria que tenemos las pequeñas y medianas empresas es muy grande. Desde el sector privado tenemos que seguir financiando el déficit y la ineficiencia del Estado.

Perfil

Leandro Acosta (39): desde hace algo más de diez años se integró a la pequeña empresa familiar (que inició su padre) por entonces focalizada en la cría de cerdos.

Asumiría luego la conducción del negocio para avanzar en la cadena. Hoy faena y comercializa carne porcina y chacinados, en su establecimiento "El Aragonés", de San Rafael. Vende al público, a frigoríficos, restaurantes y pequeñas carnicerías del Sur de Mendoza.

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