Nélida Rojas, la líder en Mendoza de la organización Tupac Amaru, fue detenida acusada por los delitos de usurpación y coacción agravada.
La agrupación kirchnerista tenía 80 denuncias por supuestas estafas a familias con la construcción de viviendas sociales. La mujer se presentó de forma voluntaria pero en el Gobierno provincial sospechan.
La detención de ayer por la tarde en Lavalle incluyó al esposo de Rojas, Ramón Domingo Martínez, y sus dos hijas. Al parecer, la familia fue por propia voluntad a la dependencia judicial y la medida la dispuso la fiscal Gabriela Chaves, que investiga las denuncias contra la organización que en el país lidera la jujeña Milagro Sala, detenida desde hace más de un año en su provincia. La familia pasó la noche en una dependencia de Las Heras.
Virtudes Della Santa, integrante del Comité por la Liberación de Milagro Sala, comentó que el acto "se inscribe en una forma de persecución política hacia la Tupac y otras organizaciones".
Hoy a las 11.30 harán una conferencia de prensa en la Fundación Ecuménica de Cuyo con otras agrupaciones que "acompañan en solidaridad".
Un dato que trascendió y que deja lugar a la sospecha es que hacía tiempo la fiscalía había solicitado un allanamiento. Todo indica que en principio la conjueza Érica González (a cargo momentáneamente) había autorizado el procedimiento para el lunes que viene pero justo antes aparecieron los acusados con sus abogados.
En el Gobierno rechazan la idea de que haya sido una mera coincidencia y pidieron iniciar una investigación. "Esto es muy grave. Han filtrado desde el Juzgado de Garantías un allanamiento que era para secuestro y detención", apuntó un funcionario. La compulsa penal ya está en marcha y la lleva adelante la fiscal Cecilia Vigner.
A nivel nacional, la propia Tupac Amaru denunció la detención por la red social Twitter "en el marco de la persecución política". Días antes celebraban que la procuradora general de la Nación, Alejandra Gils Carbó (vinculada al kirchnerismo), dictaminara que la detención de Sala era ilegal.
Las denuncias
En su edición del 21 de febrero pasado, Los Andes informaba que desde noviembre a esa fecha se habían acumulado 80 denuncias contra el grupo por "coacción" y "posibles estafas". Las denuncias habían crecido desde que el 20 de noviembre, en el programa "Periodismo Para Todos" (PPT, Canal 13, Buenos Aires), Jorge Lanata denunciara la metodología de la asociación.
Según las denuncias, a todos al ingresar a la Tupac se les pedía un monto de dinero inicial (que en 2015 era de 3.000 pesos). Además, debían pagar un canon mensual ($ 80 aproximadamente) y tenían que cumplir con la asistencia obligatoria a los actos y "pagar por las pecheras" que les daban para ir a esos actos.
Otras sospechas eran haber permitido que personas de otros departamentos se inscribieran en las cooperativas para aspirar a una casa en Lavalle.
También hay casos de ventas -sin papeles- de casas a personas que no eran las destinatarias de las viviendas. De hecho, hay gente que aduce que les pidieron “entre $ 30 mil y $ 40 mil” para lograr la vivienda, pero que “nunca la entregaron”.
En su momento, Rojas se despegó de las denuncias: “Nosotros hacíamos listas con posibles beneficiarios. Era el IPV el encargado de aprobarlos”. Según su versión, la agrupación “sólo cobra $ 80 por mes” y ellos daban “solución habitacional a los compañeros, que son militantes”.
En Mendoza hay 1.231 viviendas sociales que dependen del programa de "Integración Socio-comunitaria" que ideó el kirchnerismo. A la Tupac le tocaron 738 casas, lo que implicó un desembolso nacional de $ 650 millones. El programa ha estado bajo la lupa con una triple auditoría del Tribunal de Cuentas, el Ministerio de Economía y la Dirección de Cooperativas.
