La “bruja” de Menem, robada y usurpada

A la conocida Azucena Agüero Blanch le destruyeron y usurparon su taller en Luján de Cuyo. Además le robaron y estropearon pinturas.

Conocida como "la bruja" de Menem, hoy Azucena Agüero Blanch no pudo anticipar su propio futuro. Se lamenta por ello y por eso lo quiere hacer público.

Según sus palabras, acompañadas por una presentación escrita ante la fiscalía Luján-Maipú: "su taller de Perdriel, Luján de Cuyo, primero fue destruido y robado; y después usurpado por desconocidos".

Ocurrió el jueves 11, cuando descubrió que el lugar, un amplio terreno -donde había una finca- con un pasillo comunero de más de 100 metros, cerrado y con el cartel de "propiedad privada", había sido violentada. Era el lugar que eligió para su taller de artes plásticas y tienen la escenografía del Pedemonte como musa inspiradora para sus pinturas.

Una herencia

Sin nombrarlo, pero en forma abierta, la mujer -casada y viuda dos veces- habla de un hermano de su segundo marido que pretende cobrar "una herencia con un testamento trucho", por lo que no descarta que "detrás de todo esto haya una mano negra que intenta apoderarse de mi patrimonio y empezó por el taller".

Antes intentaron -dijo- entrar por la puerta de mi casa (un departamento de calle San Lorenzo, de Ciudad), pero no pudieron forzar la cerradura. "La policía tomó huellas dactilares, pero nunca se pudo encontrar al culpable".

Azucena recordó que en el lugar usurpado hay dos autos un Renault 11 y un Dodge 1500 (tengo números de las patentes para saber a quiénes pertenecen) que ahora "están estacionados en el terreno".

En diálogo con Los Andes, la mujer que conoció a Carlos Menem cuando era gobernador de La Rioja, relación que se extendió en el tiempo en que el riojano ocupara la Casa Rosada y que ella, en su calidad de parapsicóloga, lo asesorara, confió que "entre el material destruido había un trabajo preparado para una exposición en una de las salas de arte más importante de Los Ángeles, Estados Unidos, que se abría antes de fin año. Ahora -lamentó- ese material de más de un millón de pesos me resulta imposible de recuperar".

La "bruja"

Frente a la mujer, y más allá de la denuncia, una pregunta se hacía necesaria: ¿Cuánto hace que no ve a Menem? Y la respuesta llegó tan rápido como la usurpación por la que vino a reclamar al diario: "Es una amistad de más de 30 años y lo sigo viendo en Buenos Aires una o dos veces por mes".

En su comentario prefiere no dar a conocer el lugar de los encuentros (en un tiempo fue el Alvear Palace Hotel, donde se tiñó el pelo para evitar ser reconocida), afirmando:  "pero que nos vemos, nos vemos".

Azucena Agüero Blanch, descendiente del poeta, prosista y escritor sanluiseño Antonio Esteban Agüero (Cantata del Algarrobo), que fuera nota del New York Times, con un  enviado especial que llegó desde el Norte a la provincia, artículo que "me hizo famosa" y le permitió viajar por todo el mundo, hoy reclama por la inseguridad al señalar que "me siento amenazada y esto que me está pasando superó un sueño, una premonición (su especialidad) y se convirtió en pesadilla", concluyó.

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