Kicillof prevé un crecimiento del 2,8% y una inflación del 15%

El último presupuesto del kirchnerismo está cargado de optimismo. El ministro de Economía, Axel Kicillof, presentó ayer junto al jefe de Gabinete, Jorge Capitanich, en la Cámara de Diputados un plan de gastos para 2015 con variables económicas favorables, aunque bastante más modestas que los presupuestos de años anteriores y que las contenidas en la “Ley de Leyes” del corriente año.

El Palacio de Hacienda calculó un crecimiento del PBI del 2,8%, una inflación del 15,6% y un dólar promedio para todo el año de 9,45 pesos. Además, prevé un superávit comercial de 9.197 millones como resultado de que se exportarán 82.420 millones de dólares y se importarán 73.223 millones de dólares.

En términos generales, el Ejecutivo espera contar con recursos por 1.298.000 millones de pesos y calcula gastos por un monto un poco superior: 1.347.000 millones de pesos.

Por lo que el resultado financiero, contabilizando el pago de intereses de la deuda, será negativo en 49.000 millones de pesos.

Ante los diputados, Kicillof admitió que el crecimiento de este año cerrará en sólo medio punto, pese a que el Gobierno estipuló en el Presupuesto 2014 un alza de más del 6%.

“Esto ha sido consecuencia de la mala performance de la economía global. El mundo está incierto y poco dinámico”, dijo y sostuvo que Estados Unidos crecerá sólo el 1,7%, la Eurozona el 1% y Brasil no llegará al punto.

El titular de Economía reconoció que las exportaciones argentinas caerán un 10% en este 2014, por lo que el crecimiento del PBI arañará el 0,5%. Pese a este escenario desfavorable por él mismo descripto, Kicillof aseguró que la economía nacional crecerá el año entrante 2,8% gracias a las políticas contracíclicas del Gobierno.

El Ministerio de Hacienda no sólo tuvo que reconocer que se equivocó calculando un crecimiento para este año del 6% ya que terminará siendo de medio punto.

También aceptó que el dólar finalizará el año redondeando 8,21 pesos cuando se había estimado en 6,33 pesos.

Kicillof sostuvo que este año la inflación cerrará en 22%, pese a que el Presupuesto 2014 previó 9,9%, menos de la mitad. Además, postuló para el 2015 una baja al 15% y volvió a utilizar la palabra “desaceleración”.

Esta proyección fue la que más cuestionamientos recibió de la oposición, ya que el propio Gobierno calculó un crecimiento de los impuestos directamente relacionados con la inflación, como el IVA, del orden del 28,8%.

“El Gobierno está reconociendo una inflación implícita del orden del 30%, el 15,6% que se proyectó es un anhelo”, sostuvo la socialista Alicia Ciciliani.

“El anuncio del crecimiento del IVA de un 28,8 % esconde la inflación que el Gobierno espera como mínimo para el 2015”, agregó Mario Negri, titular del bloque radical.

Otro dato que hizo ruido a la oposición es que la recaudación en su conjunto aumentará un 28,1%, pero el total de gastos crecerán sólo el 13,2%, lo que para Claudio Lozano (Unidad Popular) y Enrique Vaquié (UCR) tiene como única lectura posible que el Gobierno está admitiendo que hará un ajuste.

“Si la inflación es realmente del 15%, entonces el ministro podrá decir que hay medidas para reactivar la economía, pero si es del 30%, entonces los salarios y el poder adquisitivo irán muy detrás de la inflación y se agudizará la recesión”, sostuvo Lozano.

Los Blancos y Portezuelo, incorporados en un artículo

Esta vez las anheladas represas hidroeléctricas Portezuelo del Viento (Malargüe) y Los Blancos (Tunuyán) fueron incorporadas al propio articulado del Presupuesto 2015, a diferencia de años anteriores donde el kirchnerismo sólo le dio cabida en planillas anexas.

En el artículo 64 establece: “Autorícese a iniciar el proceso de contratación de las Obras de Infraestructura Hidroeléctrica Chihuidos I, Portezuelo del Viento, Los Blancos, Punta Negra y Potrero del Clavillo.

Asimismo autorícese al Jefe de Gabinete a realizar las modificaciones presupuestarias necesarias a efectos de comprometer la ejecución de los proyectos, así como propiciar su inclusión en los ejercicios siguientes hasta su concreción”.

El que está más avanzado es Los Blancos, según comentó el propio gobernador Francisco Pérez. En cambio Portezuelo del Viento está muy lejos de ver la luz.

Esta mega-obra fue canjeada por Cobos en una negociación con Néstor Kirchner a cambio de que la Provincia desistiera del juicio por la promoción industrial.