Javier Bazterrica: el “gigoló” vuelve a sonreír

El mediático del momento parece más preocupado por su propia imagen que por las denuncias de estafa a más de 100 mujeres, incluida la hermana de Flavio Mendoza, por las que cobró notoriedad.

Ahora, después de trámites penales, escupitajos frente a cámara, paseos (¿pago mediante?) por todos los programas radiales y televisivos del país incluido el cable, insultos y escraches en las redes, el joven de 37 años conocido popularmente como “el gigoló” terminó por hacerles caso a quienes le criticaban la dentadura, entre otras cosas, y decidió renovarse el comedor con un afamado dentista porteño.

Evidentemente los problemas legales no le quitan el sueño, pero las críticas a su aspecto hicieron mella y el muchacho, que se presentaba como polista y se hacía llamar Máximo Nazar Anchorena ante las incautas que, supuestamente, confiaban en él y le entregaban sus ahorros para que hiciera inversiones, está ahora decidido a seguir los pasos de Guido Süller (otro que salió a decir que había sido su amante) y de tantas famosas figuras bizarras que pueblan nuestra pantalla chica.

El primero que publicó en Twitter la foto del antes y el después de los dientes de Bazterrica fue Jorge Rial, quien agregó la leyenda de “¡Este país es muuuuuy generoso!”