Jaime Torres, de los Andes a Australia

“Un charango sin fronteras” es una historia contada en fotografías. Las que capturó Osvaldo Civetta (argentino radicado en Australia) durante el viaje que realizó Jaime Torres por las comunidades originarias de ese continente. Hoy, luego de presentar esa

Por un lado está Jaime Torres, el señor de los charangos. Quien suele saludarnos con un "hola, niña" y decir frases como éstas: "Me da un poco de cosa cuando me dicen la palabra 'maestro' porque uno siempre está aprendiendo. A uno no le alcanza el tiempo de todo lo que tiene que aprender".

Por otro lado está Osvaldo Civetta, un fotógrafo que ha viajado desde Melbourne (Australia) para mostrar en Mendoza un recorrido documental que hizo con su cámara: "El viaje de Jaime Torres por las tierras de los aborígenes australianos".

Ambos, pues, se encuentran en Bodega Monteviejo porque son parte del Plus+Arte, esta propuesta artística experimental y accesible que este año anticipa el Wine Rock donde, además, Torres compartirá escenario con Catupecu Machu y Los Enanitos Verdes, entre varios artistas más.

El gran charanguista todavía trae en la retina los paisajes de la Australia profunda, que visitó en 2015. Allí, fue invitado por distintas comunidades que conforman un mapa originario. Ese viaje lo enlaza con las raíces de todos los continentes, algo que ha buscado abrazar desde el principio.

Es casi redundante reparar en que Torres es un enorme faro en ese mapa, una influencia y referente de la historia y la contemporaneidad del folklore argentino.

Eso, porque ha popularizado como nadie la magia intrínseca del charango, a través de una enorme cantidad de obras, entre sitios tan distantes como Humahuaca, el Colón, Berlín y Sidney.

Osvaldo y Jaime se conocieron en Melbourne, donde el músico tenía que realizar una de sus presentaciones urbanas. Al fotógrafo, que por entonces trabajaba para la televisión, le encomendaron documentar la gira del famoso invitado.

Fueron juntos al desierto, se internaron en la vida y las costumbres de las comunidades. Jaime dictó talleres a los habitantes de Broome "donde enseñó a cortar la caña para fabricar sikus y a tocar ese instrumento norteño", detalla Civetta.

Uno de los momentos más intensos - recuerda el documentalista-  fue cuando Torres conoció a William Barton, el referente del didgeridoo con el que compartió escenario.

"Quiero tomar la cultura más antigua del mundo y combinarla con el rico legado musical europeo", confesó Barton al tucumano que suele mezclar el charango con el rock.

En los diez mil kilómetros que Civetta recorrió con Jaime Manuela y Juan Cruz Torres, Federico Siciliano, Goyo Álvarez y Javier Gallego Romero hubo más de un encuentro mágico.

"Como el que tuvimos con Richard Hunter, el principal narrador de Goolarabooloo. "Mantengan estas historias  vivas, pero antes tienen que aprender a escuchar", insistió el viejo sabio.

El contacto con Teresa Roe significó otro portal. "Ella encabezó protestas en 2010 cerca de Broome. Es la matriarca de los aborígenes de la región Kimberly. Desafió al gobierno y a las mineras, quienes se unieron para construir una mina de gas  que amenazaba el lugar sagrado de entierro de sus antepasados".

Todas estas historias son contadas a través de retratos, los que componen la muestra "Un charango sin fronteras". Un material que respeta a los mensajeros de los pueblos oprimidos, de uno y otro lado del mundo.

Tenemos algo para ofrecerte

Con tu suscripción navegás sin límites, accedés a contenidos exclusivos y mucho más. ¡También podés sumar Los Andes Pass para ahorrar en cientos de comercios!

VER PROMOS DE SUSCRIPCIÓN

COMPARTIR NOTA