En el primer trimestre de 2016 Mendoza perdió 3.567 empleos privados registrados en comparación a igual período del año pasado.
Según economistas, la mayor parte de los despidos se concentraron en los sectores del agro y la construcción, aunque también incidieron industria, comercio y turismo.
El dato del mercado laboral fue publicado ayer por el Indec, en un informe que muestra una variación negativa del 1,3% para la provincia.
El informe del Instituto indica que entre enero y marzo del año pasado habían un total de 267.456 personas trabajando en blanco en el sector privado de Mendoza. Este año el número se redujo a 263.889 trabajadores.
La pregunta entonces es ¿en qué rubros están los 3.567 puestos de trabajo perdidos?
El informe de Indec no detalla qué actividades cayeron en cada provincia, pero a nivel nacional los sectores más perjudicados fueron la construcción, con una baja de 29.000 empleos y la agricultura, con 16.496 puestos de trabajo menos, siempre comparando primer trimestre de 2016 contra igual período de 2015.
Llama la atención que, pese a esos resultados, creció 1,16% el empleo en toda la Argentina, pasando de 6.475.755 a 6.550.964 trabajadores registrados.
El desempleo en Mendoza
Para los economistas locales, la caída del empleo privado de la provincia se concentró justamente en los dos rubros que peor resultado han tenido a nivel país.
Pablo Salvador, de Fundación Ideal, explicó que durante el primer trimestre prácticamente no hubo obra pública ni privada en Mendoza, por lo que era esperable que se observara una retracción en el empleo en la construcción.
De hecho, una medición del Índice Sintético de Producción realizada por Ideal había mostrado una caída del 13% en el nivel de actividad de la construcción mendocina durante el primer trimestre del año.
El economista Sebastián Laza también consideró al sector de la construcción como uno de los principales rubros con pérdida de empleo.
“La recesión se ha sentido con mucha dureza en la construcción. Durante el primer trimestre no hubo obras de Procrear ni inversiones privadas”, comentó.
Similar fue la lectura de Jorge Day, de Fundación Mediterránea (Ieral), quien destacó a la construcción como una de las actividades económicas con mayor pérdida de empleo entre los rubros no estacionales.
El otro gran sector señalado fue el agrícola, aunque en ese caso no sólo influyó la recesión económica sino que fue muy importante también el factor climático, que provocó cosechas con producciones por debajo de lo normal.
“Viendo las estadísticas a nivel nacional se evidencia que el agro fue uno de los sectores que más perdió empleo. Teniendo en cuenta que en otras regiones del país, como en la pampeana, se han registrado buenos niveles de producción, es factible que muchos de esos empleos perdidos estén en Mendoza”, indicó Day.
Se mostraron de acuerdo Salvador y Laza, quienes destacaron que, además del factor climático, la agroindustria ha sido muy perjudicada en los últimos años por la pérdida de competitividad del tipo de cambio. A modo de ejemplo, mencionaron a la golpeada vitivinicultura.
Por último, los expertos aseguraron que “también se perdió empleo en el comercio, la industria, el turismo y la metalmecánica”, aunque en menor medida.