Más de 300 familias hace 16 años que esperan sus casas

En 2001, en plena crisis y estallido social, un grupo de vecinos que se habían instalado en el asentamiento Los Hornos (Bermejo, Guaymallén) comenzó una cruzada para tener su casa propia.

Se inscribieron como entidad (Unión Vecinal Amigos de Guaymallén) e iniciaron los trámites para ser incluidos en algún programa provincial de vivienda. 

En 2004, y tras un primer intento fallido por ubicar a estas familias en Los Corralitos, 14 hectáreas de un predio perteneciente al Hospital El Sauce -a menos de 1 kilómetro del asentamiento- fueron donadas a la Provincia, las que un año después -durante la gestión del ex intendente Alejandro Abraham- una ley cedió al municipio.

El compromiso era que la comuna y el IPV construyeran en el lugar las viviendas para 369 familias. Para ese entonces, a la lista de beneficiarios se habían sumado los socios de la Asociación Los Leños (personal del hospital mencionado) y de las cooperativas Praderas del Pilar y Ányelus.

A 16 años del inicio de esta cruzada, no sólo nadie tiene aún sus terrenos sino que permanentemente los invade el temor de ser víctimas de usurpaciones.

“Entre octubre y noviembre apareció un hombre con un título supletorio alegando que era dueño del predio y comenzó a hacer limpieza y movimiento en los terrenos. Lo ofrecía para la venta e, incluso, dicen que llegó a vender algunos lotes a privados. Pero cuando vio que nosotros veníamos todos los días acompañados de preventores de Guaymallén y de la policía, se borró. Sin embargo, la semana pasada volvió a aparecer una mujer que viene todos los días y eso nos llama la atención”, contó Marta Altamirano, presidenta de la unión vecinal Amigos de Guaymallén y una de las personas que aguarda por su casa.

“Ni siquiera la Municipalidad ha podido poner este terreno a su nombre y eso es un riesgo, porque cualquiera que viene puede reclamarlo”, agregó acompañada de otros damnificados.

Desde la comuna, en tanto, resaltaron que tienen como prioridad resolver esta situación en el transcurso del 2017.

“Estamos tratando de reparar la forma desastrosa en que se hizo este proyecto entre 2013 y 2014 cuando (Omar) Parisi estaba en el IPV. El Gobierno había donado este predio para viviendas sociales con la Municipalidad como intermediaria, pero el expediente llegó y murió en Buenos Aires ya que nunca tuvo el apto técnico y financiero”, resaltó el director de Vivienda de Guaymallén, Carlos Scaglia, quien incluso denunció que las gestiones anteriores adjudicaron las obras de urbanización sin contar con fondos ni aprobación municipal.

“Estamos trabajando en la parte técnica y queremos llevarle tranquilidad a la gente, que sepan que van a tener sus casas. Prácticamente estamos haciendo todo de nuevo, porque el proyecto del 2013-2014 murió en el momento”, explicó el funcionario.

Nada concreto

El hospital El Sauce cuenta con un extenso prado de 92 hectáreas, de las cuales 14 donó hace 13 años para que luego se decidiera destinarlas al proyecto “Brisas del Sauce”. Aquí están contemplados los socios de las 4 entidades que hoy dejan en claro su preocupación.

“Vemos que hace 16 años estamos esperando y que todos los que llegan prometen algo y dicen que somos prioridad, pero no hay una solución concreta. Sentimos mucha bronca, llevamos tantos años esperando y no sabemos qué va a pasar”, reclamaron Hugo Cabrera, Marta Altamirano, Fernando Brizuela, Raquel Brizuela, Marta Rosa Altamirano y Mónica Ortiz, algunos de los vecinos implicados.

Constantemente quienes viven en los alrededores del terreno les llaman por teléfono a los futuros pobladores para avisarles de movimientos extraños. Y -dicen- son cada vez más comunes.

“La Municipalidad reconoce que esto es nuestro, pero por alguna razón no hacen el título de propiedad a su nombre. Y acá los movimientos de particulares no paran. Un hombre (de apellido Hernández según trascendió) cerró con alambre, hizo limpieza y loteó el terreno. Sabemos que hay gente que hasta le ha comprado a Hernández, los ha estafado”, aseguró Altamirano mientras recorría el lugar.

Entre tantos movimientos de terreno se destaca hasta una excavación hecha por este particular. “Estamos en permanente riesgo de usurpación. El municipio tiene que actuar rápido, porque si no esto no es de nadie y puede ser reclamado por cualquiera. Hasta un puente de concreto han puesto para cruzar la acequia e ingresar con vehículos”, acotaron mientras señalaban el bloque.

Muchos viven aún en el asentamiento Los Hornos. Es el caso de Hugo y su esposa Raquel, quienes llevan 31 años en el lugar. Allí sólo tienen luz y agua. “Lo que más quiero es que esto se resuelva cuanto antes. Nos preocupa mucho la incertidumbre”, sintetizó el hombre.

Mónica vive cerca y resalta que hay gente que está dispuesta a instalarse en el lugar de forma precaria con tal de que no les quiten sus terrenos: “Nuestro objetivo es que el IPV nos entregue la vivienda terminada. Nosotros somos todas familias trabajadoras, inscriptas y estamos pagando una cuota social hace 16 años”.

Prioridad para la comuna

El director de Vivienda de Guaymallén reconoció que el terreno es de los vecinos de estas 4 entidades.

“El problema es que todo el terreno se adjudicó (369 lotes) sin que tuviera los aptos técnico y financiero, sin que tenga visación el proyecto, sin un plano autorizado. No tenía el estudio de Aysam ni de Edemsa. Las cosas se hicieron mal pero ahora estamos trabajando para recuperar el tiempo perdido. Es una de nuestras prioridades”, insistió Scaglia.

Sobre el hombre al que los vecinos denuncian que intentó vender lotes (Hernández), el funcionario confirmó su presencia y destacó que se presentó en la Justicia diciendo tener un título de propiedad.

“Se presentó en diciembre, pero luego empezó la feria. Y el juez no ha vuelto a llamarlo porque no tiene documentación. Nosotros tenemos los papeles que acreditan que los terrenos son de la Municipalidad”, sintetizó.