Desde un tiempo a esta parte, transitar por las calles del Parque General San Martín se ha convertido en una osada aventura. “El caos ha empeorado desde que la Avenida El Libertador está siendo refaccionada”, dice Ana, profesora de educación física que utiliza el gran predio verde para dictar sus clases.
Aún más peligrosa es la Avenida Las Palmeras a la altura del Club Mendoza de Regatas, espacio físico que ya ha sido escenario de multiples accidentes viales. “Sólo en esta semana contamos tres choques que se han producido o por negligencia de los conductores o por falta de señalización”, relata Ana. Sin ir más lejos, el miércoles un hombre de avanzada edad fue envestido por un vehículo que dio la vuelta en ‘U’.
Pese a que los arreglos en vías principales de ese espacio verde configuran un agravante de la situación, los contratiempos en las inmediaciones del club son recurrentes desde hace un tiempo. Socios, empleados y deportistas en general confluyen en ese lugar especialmente a primera hora de la mañana -considerando el aluvión de niños y adolescentes que participan de la escuela de verano- y en la tarde-noche.
Los automovilistas se desplazan por Las Palmeras con sentido norte-sur. Al llegar a Regatas, en vez de tomar la Avenida del Prado Español o calle Las Pichardas, generalmente realizan una vuelta en U, pasando sobre una senda peatonal, y vuelven por la misma arteria.
A esta peripecia se suma la ciclovía que pasa por la entrada del club. Es en esta reducida extensión dónde acontecen la mayoría de los incidentes.
De acuerdo a declaraciones brindadas por socios de Regatas, triple fila de autos, contravenciones varias y altas velocidades son una constante. “Se creen que están en una autopista, es impresionate lo rápido que circulan”, cuenta Noelia de Robledo.
“Deberían inhabilitar el ingreso de autos al parque, al menos en las horas pico, o bien crear estacionamientos para descomprimir la zona”, pide Diego, y cuenta: “A veces hay autos que viniendo de sur a norte, desde el Prado Español, se meten en contramano por Las Palmeras, es una locura”.
Asimismo, los usuarios de este espacio advierten "la escasa presencia de policía vial y la nula voluntad del Club y de las autoridades para solucionar la cuestión".
Sin embargo, desde el club, en la voz de su presidente, José Nazar, delizaron que "el Parque ha quedado chico, todos quieren realizar actividades en este punto, y se torna imposible". Sólo al club llegan 6 mil socios por día, a lo que se suma una cantidad similar de transeúntes y ejercitantes. "Nuestra propuesta de solución, manifestada en repetidas oportunidades a las autoridades correspondientes, consiste en trasladar la ciclovía a la parte trasera del Golf Club, y habilitar los estacionamientos del Estadio Malvinas Argentinas", propone Nazar.
“Es una problemática de vieja data”, responde Eduardo Sosa, jefe de gabinete del Ministerio de Ordenamiento y Ambiente, área bajo la cual se encuentra la dirección de Parques y Zoológico. El funcionario admite que el reclamo fue elevado nuevamente la semana pasada y que, aunque es competencia de Seguridad Vial, “estamos evaluando realizar modificaciones en la zona para permitir una circulación más ordenada”.