El desafío de crecer y mantener la filosofía “startup”

Cuando nacés como una “startup”, mantener la filosofía que dio vida a la compañía es muy difícil al llegar a la expansión y al crecimiento. En Redbee actualmente lo estamos experimentando en carne propia.

Cada nuevo escalón que vamos subiendo como empresa trae nuevas demandas, problemas y desafíos, nos exige pensar con otra cabeza y repensar formas de trabajo y metodologías. Sin embargo, perder esa agilidad y ese espíritu nos alejaría de los valores por los que somos reconocidos y valorados.

Allá en el principio, cuando éramos solo tres socios, era sencillo y natural diferenciarnos por la velocidad que imprimíamos a los proyectos. Pero mantenerla cuando empezamos a sumar gente requirió un cambio en nuestra forma de pensar y armar los proyectos.

En un tercer momento, todo se acomodó, y hoy tenemos una mirada más estratégica de los proyectos, y ponderamos otras variables y ángulos de análisis, sin sacrificar velocidad en el desarrollo de los proyectos. ¿Cómo logramos esto? Gracias a nuestra filosofía de trabajo y al equipo que supimos conformar y que seguimos incorporando. No se trata sólo de contratar profesionales idóneos, sino sobre todo de sumar personas -buenas personas- que puedan empaparse con nuestra filosofía y que la puedan imprimir en el trabajo diario. Esto se ve reforzado por nuestra propia concepción de la organización del trabajo, que tiende a la horizontalidad y a la autogestión de los equipos.

También los socios fuimos mutando. En un principio estábamos “todos en todo”. Al crecer la empresa y el volumen de proyectos, esto obligadamente se fue modificando. Estamos en un momento donde tendemos hacia la especialización, enfocados: cada socio mira una parte del negocio y periódicamente, tenemos reuniones de estrategia donde se validan puntos dentro de los equipos de cada uno. Pero fundamentalmente nunca perdemos de vista que hay algo por sobre nosotros que nos une, un objetivo común, una cultura y una forma de hacer las cosas que nos define y queremos mantener.

Aún en el proceso de expansión que atravesamos, hay cinco ejes que nos permiten mantener una filosofía startup:

* Conservamos la esencia: lo fundamental para mantener el espíritu startup es no perder la esencia que te trajo hasta donde estás. En nuestro caso es asumir riesgos sin miedo, manejar en profundidad cuestiones y desafíos técnicos y una dosis de osadía.

* Buscamos talentos alineados con la cultura: siempre supimos elegir adecuadamente a nuestra gente. Al crecer, necesitamos más manos tanto a nivel operativo como de liderazgo. Nuestra estrategia es sumar líderes que compartan la cultura, al mismo tiempo que Redbee se enriquece con sus aportes, haciendo que nos movamos en nuevas direcciones, pero manteniendo nuestros valores básicos.

* Nos mantenemos cerca de la gente: a veces y propio del crecimiento y las estructuras, se puede ir perdiendo la conexión diaria con la gente. Es importante no perder de vista ese contacto, tomar el pulso de qué necesitan, qué validan, qué critican. Es imprescindible mantener esta conexión sin descuidar la mirada más amplia demandada por el negocio.

* Seguimos siendo ágiles: adaptarse a las nuevas etapas de la compañía no significa perder agilidad, el desafío cotidiano es lograr que el crecimiento no atente contra la velocidad ni la flexibilidad.

* Apostamos por estructuras horizontales: nuestro plan en el mediano plazo es formalizar una característica que es propia desde el principio, una estructura de trabajo auto gestionada donde la gente no pierde el ownership de los proyectos, donde en vez de un jefe preferimos la figura de un líder que en lugar de imponer y controlar, ayuda, guía y motiva a lograr los objetivos.