Sociedad
La Policía Rural rescató un cóndor en San Rafael
hace 6 horas
Sí, hay avances en el diálogo entre Nación y Provincia luego de que Mendoza quedara afuera del último convenio de refinanciación de deudas que promueve el Ejecutivo nacional.
Qué señales hay. Bueno, según el gobernador Fancisco Pérez, si la relación con la presidenta Cristina Fernández estuviera quebrada, hoy no hubiera habido videoconferencia para inaugurar el nuevo edificio del Instituto de Histología y Embriología, en la UNCuyo.
Resulta que la semana pasada, Mendoza, junto a Río Negro, Neuquén, Chubut, no integraron el lote de provincias que entraron en la reestructuración trimestral de desendeudamiento que anunció la Presidenta.
Claramente, su posición frente al proyecto para una ueva norma de hidrocarburos no convence a estas cuatro provincias integrantes de la Organización Federal de Estados Productores de Hidrocarburos (Ofephi).
Para Pérez y gran parte de la oposición local, se relegan derechos soberanos sobre los recursos de la provincia.
Otra señal la dio esta mañana el jefe de Gabinete, Jorge Capitanich, quien sostuvo que las cuatro provincias díscolas que quedaron fuera del último convenio de refinanciación podrían ser sumadas próximamente
"Respecto de las cuatro provincias que no han suscripto este convenio, quedan para una segunda etapa", sostuvo Capitanich.
Pero aclaró que esto requiere "una multiplicidad de requisitos a cumplir" y advirtió que "implica una evaluación sistemática por parte de la Secretaría de Hacienda y de la Jefatura de Gabinete".
"En tanto y en cuanto se cumplan esos requisitos desde el punto de vista de la información, se garantiza la suscripción de las provincias" a esos convenios que implican "la refinanciación del flujo de servicios de intereses y capital", puntualizó.
Incluso el ministro de Gobierno de Pérez, Rodolfo Lafalla, resaltó a Los Andes que “hay avances” en un encuentro que se realizará en estos días, con los cuatro gobernadores y Galuccio, quien “no dijo que no ni que sí, dijo ‘ni’” a las pretensiones que los mandatarios protestones mostraron para sentarse a la mesa de diálogo.
