Correos “modernos” y los arquitectos que los proyectaron

Estas obras constituyen un conjunto destacado de la arquitectura moderna argentina. Nacidos en Buenos Aires en 1919 y en San Rafael en 1922, y graduados entre 1947 y 1948, los arquitectos Agustín Bianchi y Eudaldo Vidal proyectaron juntos los palacios de Correos y Comunicaciones de Mendoza (inaugurado en 1951) y de San Juan (inaugurado recién en 1957). Vidal, a su vez, diseñó el de su ciudad natal en el sur mendocino, y también el de Junín, en la zona Este, y realizó también otros que se construyeron en Santa Fe, Chubut y La Rioja.

Bianchi y Vidal trabajaban en la Dirección de Arquitectura de Correos y Telecomunicaciones, organismo técnico desde el que se gestaron cerca de 80 proyectos destinados a correos y edificios especiales asociados, entre ellos, clubes, viviendas de trabajadores, pabellones médicos y usinas, necesarias para el funcionamiento de los edificios. Sólo en nuestra provincia se instalaron nueve edificios, lo que equivale al 11% de lo realizado en todo el país.

A lo largo y ancho de la provincia podemos encontrar ejemplos que representan a los tres modelos principales de correos que se proyectaron entre 1947 y 1955 desde la Dirección de Arquitectura del mencionado organismo, que dependía del Ministerio de Comunicaciones de la Nación. El primer modelo correspondió a los edificios que se destinaron a las “cabeceras de distrito”, como fue el caso del Palacio de Correos y Telecomunicaciones de Mendoza, sede del 8° distrito y uno de los diez que se realizaron en todo el país. Estos conjuntos generalmente ocuparon manzanas completas, ya que constituían los centros de distribución regional desde donde se derivaba a la red.El segundo modelo fue el de los edificios destinados a “correos intermedios”, que tenían entre mil y dos mil quinientos metros cuadrados y ocupaban menos de un cuarto de manzana. En Mendoza se realizaron tres de estos correos: los de San Rafael, General Alvear y Rivadavia.

El tercer y último modelo fue el de los “correos menores”, que tenían una superficie inferior a los mil metros cuadrados. Los casos de Campo los Andes en Tunuyán; Punta de Vacas en Las Heras, San Martín, y Villa Atuel en San Rafael, fueron los cuatro ejemplos de este tipo realizados en Mendoza. Eudaldo Vidal, que llegó a ejercer el cargo de Jefe de Proyecto de la repartición, diseñó además en 1957 el correo de Junín, que recién se habilitó en 1961.

Un rol importante lo ocuparon las empresas constructoras que realizaron las obras mendocinas, destacándose la labor de la empresa Crocco y Lifschitz que no sólo tradujo los planos de los proyectistas sino que colaboró en la adecuación de los edificios para una zona de alta sismicidad como la de Mendoza.

El ingeniero Miguel Monserrat, por ejemplo, debió ajustar el proyecto estructural que habían hecho los ingenieros Villamil y Clot para el Correo de Mendoza, cuyo bloque principal, el de avenida San Martín, tenía más de siete niveles. A la inauguración de este edificio, realizada el 31 de octubre de 1951 -Día del Ahorro Postal- asistieron autoridades nacionales y provinciales que destacaron la relevancia de la obra. Entre los discursos sobresalió el del ministro de comunicaciones, Oscar Nicolini, quien agradeció al constructor, a los proyectistas, a los técnicos, a los artistas y obreros “por el empeño con que habían concretado la monumental obra”. El edificio aún hoy se destaca por la sobriedad y articulación de sus volúmenes, la presencia de los pilotis, el muro cortina, los parasoles de hormigón y el remate sinuoso y colorido del tanque de agua, un hito urbano de la ciudad.

Nota: para conocer más sobre estas obras, véase; Moretti, G. "El Palacio de Correos y Telecomunicaciones de Mendoza", En: Collado, Adriana (dirección) "Arquitectura Moderna y Estado en Argentina" disponible aquí: