El mercado inmobiliario cierra un 2014 con escasos motivos para festejar. Es que las ventas se desplomaron un 55%, lo que permitió a los hombres del sector rotular al año pasado como uno de los peores de la última década.
"Estoy en la actividad desde el año 1988, vivo de mi negocio inmobiliario y sinceramente muy pocas veces hemos tenido un año tan malo a nivel económico. Ni siquiera con la hiperinflación tuvimos esta baja de ventas ya que en aquellos años la gente compraba propiedades para asegurarse ante el alza descontrolada de precios. El 2014 hubo inflación pero siguió el cepo al dólar y un recesión que terminó por planchar las operaciones. Puedo decir que las ventas durante el 2014 cayeron más del 50%", apuntó Antonio Rez Masud, de la inmobiliaria Rez Masud.
El balance amargo también lo realizó Miguel Astorga, flamante presidente del Colegio de Corredores Públicos Inmobiliarios de Mendoza. En su opinión las escasas ventas que dejó el 2014 no se cristalizaron por la nula actividad de la obra privada.
"No se realizaron obras nuevas, no hay mega emprendimientos, casi no hay departamentos y viviendas nuevos y los pocos que se ejecutaron eran porque ya estaban pautados de años anteriores", agregó Astorga. Y precisó la caída de ventas para el año 2014 en un 55%.
Si a la casi inexistente obra privada se le suma la presión tributaria que en el 2014 fue más alta que otros años, influyó, según Manuel Otero para que las ventas se congelaran.
"Ha sido un año muy malo y las ventas tuvieron desplomes muy continuos en casi todos los meses, pero para promediar ha sido mayor al 50%. Gran parte de toda ésta realidad estuvo marcada por las cargas tributarias tanto a nivel provincial con rentas y las tasas municipales se quintuplicaron durante el 2014. Los servicios también crecieron mucho. Para citar un ejemplo, si en el 2013 una propiedad promedio pagaba $ 2 mil anuales en concepto de impuesto inmobiliario y tasas, el valor en el 2014 fue de $ 20 mil anual", detalló Otero
Las voces son coindicentes: los únicos inmuebles que algo movilizaron la venta fueron lo que se situaron hasta los $ 700 mil. "Los valores de venta más alto, fue casi imposible venderlos durante el 2014", apuntó Otero.
Una apreciación en sintonía con Santiago Debé, representante de prensa y relaciones instituciones del Colegio de Corredores Públicos Inmobiliarios de Mendoza y titular de Inmobiliaria Debé quien agregó que la venta de propiedades rurales estuvieron paradas durante el 2014.
También incidió en las escasas operaciones de compra y venta la falta de crédito de los bancos."El Procrear fue para algunos solamente que pudieron acceder con dificultades", reseñó Rez Masud.
La escasez o casi nula actividad comercial en materia de ventas también fue extensiva para la venta de locales comerciales.En ésa franja del sector inmobiliario, según Otero, las operaciones fueron casi inexistentes.
Lotes, más buscados
La única nota positiva en materia de ventas se la llevaron las casas o departamentos con valores entre $ 400 mil y $ 600 mil y los lotes con precios que oscilaron entre $ 150 mil y $ 200 mil.
"Hay gente que tiene capacidad de ahorro, entonces en lugar de dejar su dinero en plazos fijos, cambiar su auto o viajar al exterior que cada vez se dificulta más decidieron capitalizarse invirtiendo en tierras y en algunos casos en departamentos pequeños o viviendas de uno o dos dormitorios con un baño", apuntó Debé.
El 2015 más de los mismo
Para los inmobiliarios, el año que se inicia no marcará cambios drásticos en materia comercial."Seguramente la venta seguirá igual, al menos en el primer semestre, si es que algunas variables macro económicas no cambien, que lo dudo porque estamos en un año eleccionario que tendrá todos los aditamentos de inflación , emisión monetaria y gasto público", reflexionó Otero.
Para los hombres del sector, el 2015 tendrá en ventas un sabor amargo similar al que dejó el 2014. ¿El crecimiento? habrá que esperar, para casi todos recién comenzará en el 2016.
Los alquileres
Desde todas las inmobiliarias coinciden en afirmar en que lo único que se movió bien en el año fueron los alquileres.
"Existen unos 599 departamentos en Mendoza y el Gran Mendoza aptos para alquilar, lo que habla de una oferta abundante que siempre lo fue durante el 2014. Los propietarios al no poder vender sus inmuebles por no encontrar interesados en pagar las condiciones que fijan resolvieron volcar esas propiedades al mercado de alquileres lo cual fue positivo por la alta demanda habitacional que existe en la provincia", señaló Santiago Debé, del Colegio de Corredores.
Con resultados evidentes a la vista, para los inmobiliarios los alquileres hasta $ 5.000 fueron lo que lograron movilizar el mercado.
Los valores superiores a los $ 7mil no tuvieron tan buen balance y según Antonio Rez Masud, de Inmobiliaria Red Masud hubo razones económicas que frenaron las operaciones en ésta franja de precios más alta para alquilar.
"Si un alquiler de una casa en un barrio privado cuesta $ 7.000 a ésa cifra hay que sumarle los servicios lo que redondea $10 mil y luego deben agregar los gastos de una familia tipo como alimentos, colegio, pago de patente, gastos de medicina etc, así una familia tipo de cuatro miembros debe disponer de un ingreso de $ 20 mil, lo cual son pocas en Mendoza", reflexionó Rez Masud
Ante los precios altos de alquileres de casas en barrios privados hay una tendencia que empieza muy lentamente a vislumbrarse: familias que se unen para pagar rentas más altas. Así al menos lo señaló Miguel Astorga, presidente del Colegio de Corredores Públicos Inmobiliarios de Mendoza "hay familias que están acordando vivir en un a casa grande de tres o cuatro dormitorios con tres baños y reparten los gastos de alquiler. Es una forma de poder acceder a una vivienda confortable, grande en un barrio privado", añadió Astorga.