Caso Florencia: investigan al entorno familiar de la pequeña asesinada en San Luis

La jueza penal de San Luis Virginia Palacios dispuso diversas medidas en el marco de la causa por el crimen de Florencia Di Marco, la niña mendocina de 12 años hallada violada y estrangulada en la localidad puntana de Saladillo. Busca determinar los pormenores del suceso y establecer si la madre de la víctima pudo haber tenido alguna responsabilidad en lo ocurrido.

Fuentes judiciales informaron que con ese objetivo, Palacios ordenó que una comisión investigadora viaje a San Martín, donde vivió Florencia y su familia hasta hace aproximadamente un año, cuando se mudaron a la capital puntana.

La magistrada requirió a la comisión que realice un informe socio ambiental de cómo vivían en ese lugar, cuál era su medio de vida y si el hombre imputado cuenta con antecedentes policiales en aquella localidad.

Otra de las medidas dispuestas por Palacios es la realización de una Cámara Gesell al hermano de 9 años de la niña asesinada, e hijo del acusado Lucas Gómez, quien todas las mañana era llevado a la escuela por su padre junto a Florencia.

En tanto, la magistrada planea llamar a declarar como testigo a la mamá de la víctima, Carina Di Marco, y al hermano de ésta, entre el 17 y 20 de abril próximo, añadieron las fuentes.

El lunes al dar a conocer el procesamiento de Gómez por el delito de "abuso sexual doblemente agravado por la calidad de guardador y por mediar situación de convivencia preexistente en concurso real con el delito de homicidio criminis causa por mediar alevosía y violencia de género", la jueza dio una conferencia de prensa en la que aseguró que la investigación continuará hasta que no quede "ningún cabo suelto".

Si bien la magistrada no quiso responder consultas sobre posibles responsabilidades de la madre de Florencia en lo sucedido, dijo: "En ese orden se seguirá avanzando y se adoptarán todas las medidas tendientes a determinar si a la progenitora le cabe algún tipo de responsabilidad o no".

Palacios hizo además una pormenorizada enumeración de las pruebas obtenidas contra Gómez, que le permiten creer que fue el autor del crimen y que el ataque fue cometido entre las 3 y 6 de madrugada del 22 de marzo último en la localidad de Saladillo, la misma donde fue encontrado el cuerpo.

"Está demostrado que el día del hecho Lucas Gómez era la única persona que tenía bajo su órbita de custodia a la menor", dijo la jueza, ya que la madre de Florencia estaba internada porque acababa de dar a luz.

La magistrada afirmó que se encuentra acreditado que tanto la violación como el asesinato de Florencia se produjeron en las cercanías del lugar en donde se encontró el cuerpo. Entre las pruebas para sustentar el procesamiento se encuentran los cuatro testimonios de las personas oriundas del lugar que identificaron a Gómez y al Renault Megane, negro, que conducía, a lo que se suman las imágenes de las cámaras del puesto de Los Puquios, por las que se "logró establecer la ubicación geoespacial del imputado, entre las 3 y las 6", indicó Palacios.

Los testigos reconocieron al acusado, aunque dijeron que "tenía más pelo la noche del crimen y que el auto había sufrido un golpe importante en la parte inferior, a causa de un badén", datos que pudieron corroborarse posteriormente.

Otro de los elementos ponderados para procesar a Gómez, dijo la jueza, fueron las "maniobras de coartada", entre ellas que "se presentó en la escuela donde asistía la menor, en horas del mediodía, buscándola y aduciendo que la había dejado en primeras horas de la mañana, encontrándose debidamente acreditado que la menor nunca ingresó al establecimiento escolar".

Además dijo que se determinó que la mochila de Florencia "fue arrojada por el imputado" en inmediaciones al camino situado en la parte posterior del supermercado del barrio Lince, donde su vehículo fue captado por cámaras de seguridad. "En dos oportunidades, del rodado de propiedad del autor, se ve pasando por primera vez a las 10 de la mañana, y una segunda a las 10.12", hasta que a las 10.52 se ve que pasa la persona que presuntamente halló la mochila, detalló la jueza.

Finalmente, la magistrada dijo que del análisis del teléfono celular de Gómez surgen "actividades permanente de conexión con páginas de pornografía gay" y que hay una franja de desconexión entre las 3.17 y las 8.16 de la mañana del 22 de marzo, que coincide con la data de muerte de Florencia.

En su procesamiento, Palacios pidió al procurador general Fernando Estrada y al Superior Tribunal de Justicia que disponga las medidas correspondientes ante la conducta asumida por el médico forense que intervino en la causa, Enrique Torres, por "la información vertida a los medios de comunicación cuando la causa estaba en plena etapa de investigación y pudiendo haber puesto en serio riesgo los fines del proceso en relación al orden del descubrimiento de la verdad real".