Buenas perspectivas para el sector porcino en Mendoza

Mendoza produce entre 20% y 30% de la carne de cerdo que se consume en la provincia siendo el porcentaje restante importado de provincias como La Pampa, Córdoba y, en menor medida, Buenos Aires.

Los datos oficiales de la Dirección de Ganadería indican que el consumo per cápita está entre los 13 y los 14 kilos. "para poder satisfacer esta demanda deberíamos contar con 12.000 madres y en la provincia el número no llega a los 8.000", explicó el encargado del área, Néstor Mario Guizzardi.

Hoy la actividad se encuentra en crecimiento, según los datos publicados por el Ministerio de Agroindustria de Nación. La faena de porcinos marcó un nuevo récord histórico al totalizar 5.442.373 cabezas entre enero y noviembre, lo que marca un crecimiento del 8,45% en comparación con el mismo lapso del 2015, cuando fueron faenados 5.018.458 animales.

En este sentido, la producción de carne porcina aumentó 7,32% entre enero y noviembre de este año, al alcanzar 472.696 toneladas de res con hueso, el mayor volumen logrado por la actividad para los primeros once meses del año.

Puntualmente en Mendoza existen 400 productores porcinos registrados en Senasa que producen entre 30.000 y 40.000 capones (así se denomina a los cerdos más grandes). La mayoría de esto, cerca del 70 % están ubicados en el sur provincial, mientras que el resto están divididos entre Tunuyán, San Carlos y Lavalle.

Guizzardi contó que "ingresan a frigoríficos de Mendoza de otras provincias unos 122.000 porcinos al año, que representan unos 9.700.000 kilos. A eso se le suma lo que entra fresco faenado que son unos 5.000.000 de kilos, más los chacinados que son unos 9.000.000 de kilos más, estamos cerca de los 24.000.000 de kilos. Esto representan cerca de 235.000 capones aproximadamente".

El director de Ganadería explicó que un productor para que sea efectivo debería producir unos 20 capones por madre que dan a luz dos veces y media por año. "Hoy son pocos los que logran ese número en Mendoza", remarcó.

El funcionario manifestó que "uno de los objetivos que tenemos es aumentar el índice de destete, para esto necesitamos tecnificación y brindar la infraestructura adecuada en las maternidades, lo que mejoraría los rendimientos. Tenemos espacio para crecer".

Según los datos brindados por Guizzardi, la producción porcina es rentable. "Un capón en pie puede tener un costo de producción de $ 2.000 de los cuáles $ 1.800 es alimento y la rentabilidad que se puede obtener ronda entre los $ 400 y $ 500. Faenado la ganancia sube y ya hablamos de entre $ 800 y $ 1.000 de rentabilidad, en promedio".

Los protagonistas

Todos los productores consultados por Los Andes coinciden en señalar que el sector está en crecimiento, pero aclaran que necesita más apoyo y acompañamiento, tanto del Gobierno provincial como municipal, para potenciar ese crecimiento.

Hay dos aspectos que se resaltan, el primero es la necesidad de acceder a crédito a tasas blandas, y el otro es la necesidad de ordenanzas y normas más modernas que contemplen la actividad que realizan.

Ricardo Gutiérrez, productor de San Rafael que además junto a otros colegas están involucrados en toda la cadena de valor, remarcó como principal inconveniente los elevados costos que tienen en comparación con otras provincias, principalmente por los fletes de los alimentos que son a base de maíz.

"Para potenciar el crecimiento tenemos que trabajar en un ordenamiento territorial que reconozca la actividad que realizamos y en el acceso al crédito para pequeños productores, que hoy es casi inexistente", remarcó Gutiérrez.

Y agregó que "si bien la infraestructura es necesaria, también debe existir un trabajo de tranqueras para dentro del productor para ser más eficiente en los recursos".

Gutiérrez, quien es además médico veterinario y produce unos 50 capones mensuales, evaluó que "el sector viene con un crecimiento neto y muy fuerte de mercado y con el acompañamiento del Estado y la eficientización del trabajo de los productores podemos aprovechar esta realidad".

En esta misma línea se expresó Roxana Arrollo, de San Rafael que produce entre 25 y 30 capones mensuales. "Tenemos mucha demanda y que la producción local no está pudiendo satisfacer. Pero se hace difícil hacerlo cuando no tenés acceso al crédito, ya que no existimos para el sistema".

Y agregó que "estamos en un proceso de crecimiento espectacular y estaría bueno aprovecharlo. Tenemos un año malo en agricultura y de parte de las autoridades necesitamos apoyo para crecer. Nosotros somos solo productores de cerdo y no tenemos otra actividad, mientras que otros la tienen como de segundo orden. Tenemos el problema de los costos de alimentación que son muy altos y casi nulo acceso al crédito es muy importante que es muy importante. Abordando estos temas, creceríamos mucho más".

Oscar Moreno, productor de unos 260 capones al año en General Alvear, explicó que existen muchas personas interesadas en iniciarse en la actividad, pero que es necesario ver el tema de costos, porque los alimentos son muy costosos.