Bárbara Diez: la wedding planner más famosa enseña cómo planificar una boda

Ella trasciende el mundo de su marido. Es una de las wedding planner más famosas del país. Y sí, está casada con Horacio Rodríguez Larreta, el nuevo Jefe de Gobierno de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, lo que la convierte en la nueva Primera Dama Porteña. Hace mucho ella planificó su boda con el tiempo que pudo. Quince años atrás era traductora de inglés. Para su casamiento pensó en un té con 250 invitados. Ella contó que todos se fueron muy contentos y que la tercera vez que le elogiaron un evento comenzó a tomarse el tema más en serio.

Como para comenzar planificó el casamiento de una amiga, gratis. En la tercera oportunidad llegó a sus manos la boda de Julieta Ortega y desde ese momento no paró más. Organizó el casamiento de Macri y Awada, Jelinek y Fariña, Lopilato y Bublé y muchos famosos más.  
En una charla con Estilo, esta famosa experta relata las nuevas tendencias, lo que se dejó de usar, los tiempos de planificación de una boda, las opciones para los que no tienen mucho dinero y mucho más. Sus claves.

-¿Qué no puede faltar en una boda?

- El ADN de los novios es lo que no puede faltar. Ni la torta de bodas, ni el carnaval carioca, ni los show en vivo hacen que una boda sea extraordinaria. Lo esencial es que la boda hable de quiénes son ellos como pareja. Siempre digo que una boda exitosa es aquella que logra transmitir en cada detalle la personalidad de los novios.

-¿Cuál es la última moda en relación a casamientos? ¿Qué se dejó de usar?

- La autenticidad es la moda por excelencia. Hoy los novios son más espontáneos, no prestan tanta atención al qué dirán, ni cumplen con ciertas tradiciones que no tienen mucho significado para ellos. La libertad y la creatividad sin límites son el sello de estos tiempos.

-En el caso de una pareja que quiere hacer algo pequeño por falta de dinero: ¿qué le recomienda para que el casamiento sea barato pero hermoso?

- Doy fe de que es posible tener una boda maravillosa sin invertir un dineral. Mi propia boda es la prueba de que un simple té con familiares y amigos puede ser una manera excepcional de celebrar el amor, sin tener que gastar sumas exorbitantes. Recomiendo acotar los invitados a lo esencial, rodearse de afectos y reducir al mínimo los invitados de compromiso. Invitar a la propia casa también es una opción muy cálida y acogedora. Sobre todas las cosas recomiendo intentar que la boda, por sencilla que sea, exprese la identidad de los novios.

-¿Con cuánto tiempo conviene comenzar a planificar una boda?

- No hay un tiempo mínimo o máximo para empezar a organizar un casamiento. Depende del tipo de boda que se planea y de la personalidad de los novios. Por ejemplo, en Barbara Diez Event Planners organizamos casamientos con dos meses hasta un año y medio de anticipación.

- El día del casamiento, ¿cómo se calculan los tiempos para que todo salga bien?

- Hay que planificar a consciencia los tiempos para que ese día todo marche a buen ritmo, sin grandes mesetas o corridas innecesarias. En mi libro “Arquitectura de una Boda” explico cuáles son los tiempos ideales para, por ejemplo, la preparación de la novia, el cocktail de recepción, el servicio de catering, las tandas de baile, el armado y desarme de la fiesta, etc. Por supuesto que cada boda es única y tiene su propia dinámica, pero hay formas de lograr que todo suceda armónicamente.

-¿Qué le recomienda a una pareja que quiere comenzar a planificar su evento?

- Lo primero es definir cuál será la personalidad de la boda, cuál será su identidad o concepto. Esto es: identificar nuestro ADN como pareja para que todo lo que decidamos a continuación tenga esa impronta. Después sugiero reservar el salón y la iglesia o templo. A partir de ese momento ya pueden descorchar una botella y empezar a celebrar.