¿Qué pasaría si encerramos a un grupo de personas en una habitación, para que vean una obra? Un cuarto de hotel entraba a la perfección en “A puerta cerrada”, una de las obras clásicas del filósofo y escritor Jean Paul Sartre; que tuvo en Mendoza, en el ‘96, una versión que quedó para la historia de la escena local, interpretada por Ivana Catanese, David Ponce y Celeste Alvarez.
En esta nueva ocasión, esa literalidad de representar la historia en una habitación, como relata el texto del escritor francés, fue lo que movilizó la actriz mendocina Jimena Del Pozo a embarcarse en su primer proyecto como directora. Y el desafío no era menor: representar una obra en una habitación, sin escapatoria, y bajo los textos de Sartre suena por demás atrapante.
En “A puerta cerrada”, el drama escrito por Sartre en 1944, se traza la historia de dos mujeres y un hombre, confinados al castigo eterno de la convivencia. Convertidos al mismo tiempo en víctimas y verdugos, obligados a respirar los unos los suspiros de los otros.
Luego de su estreno en diciembre pasado en Buenos Aires, la puesta llega por primera vez a Mendoza y brindará diez funciones en el hotel Huentala.
El infierno es el otro
Lejos del ser la habitación del pánico, en la obra, el público es parte de la tensión que implica estar encerrado en una habitación, presenciando una historia compleja, cargada de poética y existencialismo.
Con un mensaje filosófico, propio de Sartre, los personajes en cada diálogo y acción mínima en la intimidad del espacio, desgranan cálculos oscuros de sus lamentos y rezuman verdades del dolor de la existencia conjunta. Descubren, de una vez y para siempre, que el infierno son los otros.
“El registro de la actuación es muy naturalista, no expresionista. Para que el público se sienta identificado. Comenzamos con este proyecto en marzo del año pasado y en un principio la íbamos a hacer en el hotel Faena. Pero luego la hicimos en Mansión Boedo, que es una mansión del 1900. Y aprovechamos a hacer un recorrido por la casa, hasta que entran en la habitación. Ahora lo vamos a hacer en el Huentala y el recorrido va a ser similar. En la obra te dan a entender que es un hotel”, comenta la actriz y directora mendocina Jimena Del Pozo, que regresa a su provincia natal para presentar esta puesta con la que debutó en la dirección.
Y aunque la obra tiene su tránsito a nivel mundial, por primera vez decidieron llevarla a la intimidad de una habitación y sacarla del espacio convencional de la sala.
“Los últimos tres años hice este tipo de teatro intensivo con la compañía Usted está aquí, de la cual formo parte junto a los actores. Y a mí me encanta esta obra y me imaginé hacerla en una habitación, llevarla a la literalidad total, que te encierren en una habitación con los personajes y el público. Igualmente creo que lo pudimos hacer porque tenemos un entrenamiento y experiencia en este teatro cercano”.
Luego de su paso por la Universidad Nacional de Cuyo y algunas experiencias en el teatro local, Jimena Del Pozo se afincó en Buenos Aires donde se formó con Claudio Tolcachir y forma parte de la compañía Timbre 4. Actualmente protagoniza “Usted Está Aquí”, entre otros proyectos.
Tulio Gómez Alzaga, Nicolás Deppetre, Antonella Saldicco y Graciana Urbani son los protagonistas de esta historia humanista, amarga, que pone en la cumbre al ‘ser’, y la irónica necesidad de ser visto para existir, al tiempo que la mirada ajena nos destroza.
- Con esta obra debutaste como directora, ¿cómo fue ese proceso?
- Fue más de inconsciencia, sino no lo hacía. Después me di cuenta de que es un texto difícil y queríamos hacerlo lo más cercano posible, por su nivel de existencialismo. Tratamos de cortar un poco eso. Ensayamos muchísimo y armábamos un cuadrado, donde los actores se movían y no podían repetir la misma acción.
Trabajamos mucho el desapego total del espacio, donde a la vez es lo único que tenés. En cada función es diferente, no tenés el mismo espacio para moverte. Si entran dos personas más, te cambia todo. Y eso es lo divertido también: que la obra se termina de armar con el público. No pasa si el público no está ahí.
Al público le hacemos poner unas máscaras rojas, para que entren más en situación con las miradas y el acercamiento. No lo pensé en solo comunicar el mensaje de la obra. De repente con el proceso nos dimos cuenta de lo que estábamos haciendo.
-Es un texto largo y complejo, ¿tuvo algunas modificaciones?
-Hicimos algunas pequeñas, para acercar el diálogo al público. Eso es muy Tolcachir que te dice: “¡Acercalo!”. Necesitás acercar lo que dice el personaje, porque sino no te lo creés. Trabajé con Fernando Rodil, que es dramaturgo, y él adaptó el texto.
No nos animábamos a cortar la obra, pero por otro lado, es larga y dura dos horas. Y era imposible tener a 15 personas dos horas encerradas en la habitación. En vez de cortar escenas o de cortar párrafos, cortamos oraciones de cada diálogo, sin perder el sentido del texto.
-¿Creés que el teatro actual va hacia el camino del teatro intimista y no convencional?
-El teatro a lo largo de la historia siempre ha mantenido el contacto con el público. Con las redes sociales hay otra vida virtual. Y el teatro sigue manteniendo ese ritual, que necesita del público. Y eso cobra otra dimensión para la gente, lo vive de una manera especial. Por lo menos así lo veo en mi experiencia y la devolución del público. Y eso tiene que ver con el contacto que se produce.
La ficha
"A puerta cerrada"
Dirección: Jimena Del Pozo.
Actúan: Tulio Gómez Alzaga, Nicolás Deppetre, Antonella Saldicco y Graciana Urbani.
Funciones: hoy, miércoles 11, jueves 12, viernes 13 y sábado 14 de mayo. A las 20 y 22 horas.
Lugar: hotel Huentala (Primitivo de la Reta 1007).
Reservas: reservas.apuertacerrada@gmail.com o en Fan Page A puerta Cerrada.
